miércoles, 31 de octubre de 2012

Dulce o truco


Los anglosajones, americanos, irlandeses, canadienses y británicos primordialmente, son más optimistas a la hora de celebrar la víspera de los muertos, la noche de Walpurgis o noche de las brujas, que en la religión católica es noche de difuntos, ellos la llaman Halloween.
La fiesta de Halloween consiste en vaciar una calabaza y hacerle con un cuchillo unos ojos, nariz y boca y ponerle una vela dentro, disfrazarse como si fuese carnaval y salir por la tarde noche de casa a casa a pedir el aguinaldo de tan señalada fecha.
Cuando esto último sucede, los niños llaman a las puertas, sabiendo que a los que visitan tienen preparado algún dulce para ellos. La pregunta clave es "dulce o truco", (trick or treating), una mala traducción del inglés que se ha generalizado, pues la traducción correcta sería "dulce o susto" o "dulce o travesura".
Los niños, disfrazados de muertos vivientes, vampiros, fantasmas, y otros personajes de terror y del más allá, amenazan simbólicamente con darle un susto a la persona que no tenga dulces para ellos cuando les abren la puerta.
La fiesta se completa con otras fiestas en pubs, discotecas, clubs de las ciudades donde los jóvenes se disfrazan y acuden a un gran baile. Todo optimismo para celebrar una fecha triste, qué mejor forma de entender la vida, la de mirar al futuro recordando el pasado con alegría.
A pesar de que en España la gente es reacia a adaptar esta tradición, para eso somos unos auténticos expertos, Halloween se ha extendido con los años a otros países como Australia, Nueva Zelanda, Perú, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, entre otros. En España se prefiere la tragedia griega, como en Italia, por la pérdida del ser querido, es decir, el drama de sentarse en la lápida del panteón con el luto de rigor.

Los brotes verdes de la Ministra

Dice Fátima Báñez, Ministra de empleo, que estamos saliendo de la crisis. Me imagino que debe de referirse a ella misma, a su propia economía, pues su sueldo ha mejorado bastante desde que su partido ganó las elecciones de noviembre 2011.
La Ministra quiere ver brotes verdes donde posiblemente no los haya, dios quiera que sí. Puede que tan sólo sean brotes de verdura, con lo cual en lugar de Ministra deberíamos de llamarla menestra.
Parece judía esta Ministra, a tenor de sus facciones, es una judía minestrone, un plato exquisito, pero que nos puede hacer defecar de color verde, es decir, que no tiene por qué ser oro todo lo que reluce, sino que puede acabar resultando caca.
Aún no sé que cifras o datos maneja Fátima Báñez, me inclino a pensar que ha subido a Montecarmelo y un ser todopoderoso se le ha aparecido, le ha entregado las estadísticas en la mano y le ha dicho "Toma chata, ahí tienes, no son los resultados de la quiniela, sino cómo va España".
Cual Moisés en Egipto, la Ministra ha dicho al pueblo llano que vamos bien, o quiere hacernos pensar que vamos bien, puede que no haya entendido el mensaje que ese ente supranormal le ha comunicado.
Quizás los brotes verdes que busca la Ministra son los de la menestra, lo que la Ministra quiso decir es que hay brotes verdes en la menestra y que si todos cocinamos menestra podemos salir de la crisis.


martes, 30 de octubre de 2012

La pobreza



En general, tendemos a asociar el término pobreza con la imagen de un hombre pidiendo limosna en la calle, o una familia viviendo debajo de un puente, nada más lejos de la realidad, aún no se ha llegado a esta pobreza estereotipada, la pobreza que vivimos es otra.
Hoy he estado tomando mi café habitual en un precioso café donde no acudía la clientela, por dos razones, a mayor número de cafeterías inauguradas, menor número de visitantes para cada uno, y por otro lado, la capacidad de gasto de los españoles, como es sabido, ha disminuido drásticamente.
La pobreza es eso, ver gente en la calle sin nada que hacer, la pobreza es ver tiendas que no venden, bares que no tienen clientela, negocios que no prosperan porque no hay demanda, porque la demanda carece del dinero que antes se tenía, porque donde había una familia con cuatro miembros empleados o dos, ahora encontramos familias completas con todos o algunos de sus miembros parados, algunos ya han agotado el paro y la ayuda.
La pobreza se extiende de sur a norte por la península, Andalucía y Canarias ya han sucumbido a ella, el paro es desproporcionado, a mayor paro, mayor pobreza, es una cadena de hechos, este tsunami que vive España dura ya cuatro años largos, todos esperamos que la tempestad traiga la calma algún día. Los efectos del tsunami han sido devastadores, hay personas que se suicidan porque ya no pueden comprar comida, situación similar pero no tan drástica como la que se vive a menudo en Grecia.
La Ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha anunciado recientemente que España está saliendo de la crisis a pesar de los malos resultados de las cifras del paro, que ya supera el veinticinco por ciento. La Ministra ha querido ver brotes verdes en las cifras de desempleo, pero con más prudencia que en época de Zapatero.
Es preocupante vivir en un país donde hay pobreza, la Ministra ve brotes verdes y nos envía globos sonda, para poder mantenerse en el poder hasta la próxima legislatura. ¿Maneja datos de rigor la Ministra? Tengo mis dudas. 
De lo que no tengo dudas es de que se va de mal en peor, en la dirección que nadie sabe, Rajoy no lo tiene claro, como Zapatero, el país se muere de hambre, ¿pedimos o no el rescate Don Mariano? Cuidado, pan para hoy y hambre para mañana, no meter la pata.
¿Cómo un país de 47 millones de habitantes y décima economía mundial puede tener una tasa de desempleo de casi seis millones de parados y semajante nivel de pobreza?
Somos pobres no, paupérrimos.

lunes, 29 de octubre de 2012

Bravuconerías



Que el Príncipe y Urdangarín se llevan mal que peor es algo que todos sabemos, pero este tema ha vuelto a ponerse de relieve con la publicación del libro Urdangarín, un conseguidor en la Corte del rey Juan Carlos, de los autores Eduardo Inda y Esteban Urraiztieta, sobre el perfil detallado del Duque con respecto a sus relaciones con la Familia Real antes y después del escándalo de la trama del Instituto Noos.
Hace no muchos meses que Iñaki Urdangarín dio a entender, amenazó indirectamente con “tirar de la manta. Parece ser que el hombre sabe demasiado. Hay, según su versión, ciertos emails que comprometen al Rey. Bravuconerías a no tomar en serio.
El hombre está imputado hasta el cuello en un país como España, donde la Justicia no es que siempre sea justa, sino que es rara. Es rara porque a la Infanta Cristina no se la imputado. Bravuconerías de la Justicia.
Iñaki no se librará de la cárcel, pero será por poco tiempo, no es de extrañar que el Príncipe esté molesto, molesta está toda España. No sólo le ha arruinado el camino hacia el trono al futuro Felipe VI, sino que, en poco tiempo, ha arruinado el prestigio de una institución sólida y consolidada como es la Monarquía. Bravuconerías de aprendiz de chulo, bravuconerías de aprendiz de empresario.
Iñaki el manchado , España no perdona. Al Rey no le queda un telediario pero a Iñaki le quedan menos de unos cuantos.
Imagino las ganas del Príncipe por no poder con sus manos estrangularlo. Pobre Felipe, futuro rey con una periodista republicana casado, que no tiene el carisma de su padre ni el genio de su esposa para poder apartarlos, porque a Cristina e Iñaki hay que apartarlos, más aún si cabe, hay que divorciarlos.  O Cristina va a la cárcel con Iñaki y allí continúan igual de enamorados, con lo cual nos mostrarían que la Justicia funciona igual para todos, incluso para las chorizos y bastardos.
¿Que el Rey estaba enterado de toda la trama? Bien pero el Rey no ha robado, el Rey una dudosa fortuna ha amasado. Bravuconerías, querer tirar de la manta cual Dioni imputado.

domingo, 28 de octubre de 2012

Tropezones en la India

Ha manifestado su campechana majestad en su viaje a Nueva Delhi “Desde fuera, España se ve mejor. Desde dentro, dan ganas de llorar”.


Imagino yo que el té de Bombay debe de soltarle la lengua a más de uno. Está Su Majestad muy dicharachero con los medios en esta ocasión.
España no se ve mejor desde fuera de España, esa perla de frase es un tropiezo más verbal de un monarca últimamente habla y hace demasiadas cosas, extralimitándose de su papel constitucional.
A España se la ve con buenos ojos cuando se trata de ir de vacaciones, pues siempre ha sido el país patio de recreo de los europeos, el cortijo de los británicos, la maison de verano de los franceses, el sitio cool de los americanos, y un largo etcétera.
Cada vez que el Rey abre la boca, la Monarquía pierde una décima de punto, no contento con ser nuestro mejor embajador en el mundo, ahora se ha convertido en nuestro negociador, porque todo hay que decirlo, a falta de políticos brillantes y que sepan idiomas, Rajoy el último, Su Majestad puede defenderse expresándose en inglés y francés.
Pero con los años, el Rey dice demasiadas frases bananeras, propias de un país bananero, es como si el tiempo no hubiese pasado, a veces cuesta creer que estemos en 2012, parece un Bienvenido Míster Marshall pero a la inversa, en este caso la comitiva visita el país de Gandhi.
Parecemos pedigüeños, lo somos, yendo por el mundo a ver quien nos echa una mano, el Rey sabe a donde acudir, los políticos no, India, Rusia, Brasil, Sudáfrica, China, son los países clave del futuro, economías emergentes, algunas de ellas ya figuran entre los primeros puestos de países más ricos del mundo.
España hace como el vecino pobre que viene a pedirte una pizca de sal o de azúcar, a cambio de algún otro favor, pero yo me pregunto, ¿qué puede ofrecer España a India? No veo que podemos darles, quizás que aprendan español en el Instituto Cervantes.
Por lo pronto India fabrica más coches que España, Daewoo, Kia, Tata, se fabrican Audi y Suzuki también, en España recuerdo que en los últimos dos años se han cerrado dos plantas, Irisbus en Barcelona y Santana en Linares (Jaén), dejando a mucha gente sin trabajo y engrosando las listas del paro.
Pedir podemos pedir muchas cosas a India, pero habría que pensar qué podemos realmente ofrecer. Podemos ofrecer que el Rey se calle más a menudo a partir de esta última visita, que ya no mande callar a dignatarios de otros países como Hugo Chávez, y deje las cacerías a Botsuana de lado

jueves, 25 de octubre de 2012

El mundo al revés




El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha reclamado este miércoles al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que se comprometa públicamente a descartar una intervención militar sobre Cataluña para frenar un referéndum de autodeterminación.

Junqueras ha reaccionado así a las declaraciones de PP y PSOE sobre la carta que los eurodiputados de CiU, PSC, ICV y BNG enviaron a la vicepresidenta de la Comisión Europea, Viviane Reding, para censurar las "intolerables invocaciones a las Fuerzas Armadas" y a su posible intervención al hilo de la situación en Cataluña.

No doy crédito, el presidente de un partido nacionalista minoritario catalán le exige al Presidente del Gobierno de la Nación que garantice públicamente que las Fuerzas Armadas de dicha Nación no irrumpirían en la comunidad autónoma catalana, en caso de que el presidente de la Generalitat convocase un referéndum ilegal, el cual cometería un delito si lo hiciese, y le ha pedido al Parlamento Europeo por escrito que tome medidas para impedir que un país democrático como España pueda aplicar la ley con el fin de garantizar su orden constitucional.

Me pregunto si la gente tiene sentido del ridículo para ciertos asuntos, ¿acaso creen estos políticos catalanes que la Unión Europea va a interferir en todo este jolgorio organizado por dichos políticos? Ni aunque se quejasen a la ONU conseguirían algo sobre lo que la Unión Europea no tiene jurisdicción alguna.

España es un país democrático con una Constitución aprobada por mayoría en las urnas y en las Cortes, la Soberanía Nacional reside en el pueblo español y el garante de la Constitución es el Jefe del Estado, el rey Juan Carlos I.

El orden constitucional se defiende mediante la legalidad, los tribunales competentes, y, en su defecto, las Fuerzas Armadas.

Si un gobierno autonómico, del signo que sea, decide ignorar las leyes del Estado español, ahí está la Constitución para aplicarla, en su artículo 155 se deja bien claro, si esto no fuese posible, se aplicará la coacción mediante la intervención militar. Es perfectamente lícito y democrático porque es parte de los mecanismos que tiene el Estado para defender el territorio, es decir, sus regiones, o Comunidades Autónomas, que es la forma en la que está dividida España.

Nunca antes se ha realizado tal maniobra, pero estoy seguro que si España la gobernasen otros, como políticos británicos o alemanes, al día siguiente ya estaban los tanques en Barcelona. 

Que ladran, que ladren, se defiende lo legítimo, no son una colonia invadida por una potencia extranjera, son españoles como tú y como yo, de origen andaluz la mayoría, pertenecieron, pertenecen y pertenecerán al conjunto del Estado español. Lo demás son bravuconerías.

La Constitución es la Norma Suprema del ordenamiento jurídico español, nadie, a la ligera puede pasarse por el forro de la chaqueta dicha norma, es delito de alta traición al Estado, lo mismo que si el ejército o Fuerzas Armadas se revelasen contra dicho Ordenamiento Jurídico, para eso están y tienen su función, defendernos y defender el Estado, el territorio, el conjunto de las autonomías.

La Constitución es el documento que garantiza por escrito nuestros deberes y derechos, nuestras libertades como individuos y ciudadanos de este país llamado España. Si alguien intenta abolir algo de lo que contempla la Constitución o hacer política por encima de dicha norma, ahí están los tribunales de justicia y los cuerpos de seguridad del Estado para defendernos.

Cualquier país democrático actuaría de la misma manera en una situación similar, sin diferencias, los mecanismos en democracia son parecidos de un país a otro.

Lo importante de todo esto es que haya un político en España que se atreva, en una situación límite, a ordenar al ejército intervenir en Cataluña, no hay lo que tiene que haber, bemoles, porque no hay sentido del Estado como tal, ni hay grandes estadistas capaces de apagar estas revueltas y bravuconadas de los políticos nacionalistas.

No cabe un tonto más en España. A falta de sensatez, el nacionalismo gana adeptos, la cultura de la incultura.

El mundo al revés.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Armstrong el tramposo




En un principio, los organizadores franceses del Tour se empeñaron en defender a Lance Armstrong de las acusaciones de dopaje, había que borrar de alguna manera el recuerdo del español Miguel Indurain, único ciclista que había ganado 5 Tour consecutivos hasta 1999.
No es de extrañar, que en una votación reciente hecha en Francia por los máximos dignatarios del Tour de France, Indurain aparezca clasificado como octavo mejor, a lo cual, ni corto ni perezoso respondió con sarcasmo cuando le preguntaron, ¿sólo octavo? pensé que me colocarían duodécimo o decimotercero...
Miguel, por derecho propio, debe de figurar entre los tres o cuatro primeros más grandes de la Historia, junto con Eddy Merckx, Anquetil e Hinault. 
Sospechoso fue en su momento que todos aquellos ciclistas que acabaron por delante de Miguelón, impidiéndole ganar su sexto Tour en 1996, dieron tiempo después positivo en los controles antidopaje. Armstrong no fue el único que se dopó pero sí el que con más sutileza lo hizo, pues burló a todas las autoridades  y controles durante siete años.
La burla de Armstrong es la burla más grande en la historia del deporte moderno, han sido demasiadas victorias amañadas, demasiadas trampas, demasiado años ganando sin parar, hasta tal punto llegamos a creer que este tejano no era humano. El que hace la trampa, más tarde o más temprano lo acaba pagando, el precio a pagar es más alto que la trampa misma, en este caso se le desposée de todo lo que conquistó en esos años de velocidad.
Armstrong pasará a la Historia como "el tramposo", a lo cual añadió su prepotencia y chulería, quería borrar de la historia del ciclismo a Indurain, un corredor noble, y la propia organización le ha borrado a él. 
Armstrong ha vivido por el deporte, riéndose del deporte, y el propio deporte se lo ha engullido a él.
No se le va echar de menos, por lo menos por parte de los aficionados, los cuales nos sentimos insultados.
Indurain por siempre.

martes, 23 de octubre de 2012

El Periodismo en la sociedad del "look"




Los periodistas somos picos de oro, cerebros pensantes, estilográficas andantes, espaldas molidas por un trabajo demasiado duro y lleno de satisfacciones. Vivimos por nuestra profesión, morimos siendo periodistas porque nunca dejamos de serlo, como el monarca o el torero, nos ciñen la corona del cuarto poder cuando nacemos o cuando nos graduamos.
La sociedad del siglo XXI ha traído consigo grandes avances en tecnología e información, estamos cada vez más informados y menos comunicados, recibimos una sobredosis diaria de información y quien más o quien menos opina sobre ellos.
Todo el mundo es libre de opinar, la diferencia es que los periodistas buscamos, con diferencia, marcar la diferencia, influir en el pensamiento general para modificarlo y que haya un cambio sobre determinada situación, buscamos en última instancia, hacer de nuestra pequeña labor, arte.
No entiendo el instrusismo en la profesión del periodismo, una profesión noble que se ha convertido en algo vil con el paso de las décadas, las redes sociales han aumentado el peso de un cotilleo que fomenta el copieteo, cuidado con las ideas, no las expongas en ningún sitio o peligrarán.
A falta de ideas, se copia al prójimo, algo de lo que yo opine hoy será revisionado por infinidad de personas, alguna de ellas hará al día siguiente un refrito de ideas para hacer un artículo semejante en otro medio menor o mayor.
La sociedad del siglo XXI es la sociedad del look, de la imagen, ahora lo que se lleva es el periodista estrella, un periodista que sea a su vez un famoso y un personaje mediático, al menos es lo que algunos nos han querido vender y otros quieren pretender. A  falta de creatividad, copieteo, a falta de talento, mediocridad.
Por eso la profesión se pervierte, porque los que no son periodistas se meten en algunos los medios a hacer tareas de periodistas, otros optan por convertirse en estrellas mediáticas, con capacidad de influir en los asuntos de Estado, creando guerras entre medios, y todo se politiza y se banaliza. Si criticas a un medio de comunicación, algo perfectamente criticable, parece que estás defendiendo a la competecia, que piensa distinto, porque la sociedad políticamente está organizada en dos, a lo sumo tres, bloques de pensamiento.
Es una auténtica odisea, y una verdadera utopía ser imparcial hoy en día, noble en la profesión y moverse entre semejantes, a nadie le gusta el intrusismo, no soportaría sentarme en una redacción y compartir mesa con una ex modelo, o un antiguo profesor de autoescuela, o un jubilado de la mina, o una profesora de yoga, o un actor en paro, con todos mis respetos para ellos.
Cada zapatero a sus zapatos, o de lo contrario la profesión se pervierte, de hecho cada vez más vemos que todos los periódicos contienen una sección frívola de cotilleos y corazón, algo ajeno al periodismo se intenta adherir al periodismo, ¿por parte de quien hay este interés?
La prensa es la tribuna desde la que se observa el circo, no podemos dejar subir a los payasos a ella, por muy buen look que tengan, porque sino el propio periodismo se convertirá en un circo.

lunes, 22 de octubre de 2012

El bipolarismo político



Vivimos en una sociedad bipolar, o se es socialdemócrata o se es neoliberal. No hay espacio para nuevas tendencias porque las tendencias políticas se han polarizado en dos grandes bloques. No discrimino a los llamados “la tercera vía” pero por el momento, son una minoría. 
O se es rojo o se es azul, o se es del PSOE o se es del PP, o se está a favor de los nacionalismos o se está en contra, parece como si todo hubiese quedado absorbido por estas dos grandes corrientes de pensamiento, que tienen su raíz en los moderados y los partidos obreros del siglo XIX respectivamente. 
Lo peor de una democracia como la española no es que el partido del Gobierno sea malo a la hora de gobernar, sino que la oposición es peor que mala, infumable, y el colmo de todo pasa porque no haya una alternativa política que agrupe al suficiente  número de personas como para jubilar a los partidos políticos más votados del Estado. 
Una opción podría ser IU, pero la plebe tiene en mente la imagen del comunismo dictatorial y el mal sabor de boca de la II República, muchos piensan que si se vota a esta fuerza política, convertiríamos a España en una nueva Cuba o una nueva Venezuela. Demagogia barata. El Eurocomunismo es democrático, tolerante y, en el caso de España, hasta juancarlista
A tenor de los resultados de las elecciones de País Vasco del domingo, podemos comprobar cómo la sociedad vasca se desmarca de esta tendencia a la bipolarización, la suma de los diputados de PNV y Bildu es 48 diputados, de 75 que tiene el Parlamento Vasco, aunque sumemos la fuerza de PSOE y PP, sólo dan como resultado un mísero resultado 26 escaños.
La sociedad vasca, con todo mi respeto, ha decidido desmarcarse del bipolarismo del resto del Estado, la abrumadora mayoría de las fuerzas nacionalistas corrobora que ha habido un giro en la opinión de la mayoría del pueblo vasco, hartos de gobiernos de coalición o de alternar PSOE y PNV en el poder durante los pasados años. Los resultados han sido muy repartidos, y hay tres grandes grupos de opción, derecha nacionalista (PNV), izquierda abertzale (Bildu) y la suma de partidos no nacionalistas (PSOE y PP).
En Euskadi son más proclives a un reparto a tres, tres son las provincias del País Vasco, tres veces se multiplica el número 25 para dar como resultado 75 escaños en el Parlamento de Vitoria, 3 con las opciones mayoritarias en política. En el resto del Estado seguimos encallados en la alternancia de poderes entre PP y PSOE, unos lo hacen mal, los otros lo hacen peor.
Habría que pensar que el turno de partidos funcionó en España siempre hasta un cierto momento, cuando era necesario, basta con echar la vista atrás y recordar la época de Cánovas del Castillo y Sagasta, los cuales se alternaron en el Gobierno hasta que el sistema fracasó. 
En este caso ni PP ni PSOE son capaces de sacarnos de la crisis, habría que movilizar a todos esos simpatizantes del 25-S no en la deshonrosa tarea de tirarle piedras a la Policía Nacional sino en la movilización política de crear un partido del pueblo y para el pueblo, una revolución de las masas pacífica, democrática, y con unas siglas que representen a todos los que quieren seguir creyendo en este sistema democrático de España en el siglo XXI. 
Conviene pasar página y salir del bipolarismo, o acabaremos todos siendo bipolares.

domingo, 21 de octubre de 2012

El artículo 155 de la Constitución



En 34 años de democracia nunca se ha aplicado el Artículo 155 de nuestra Constitución, el cual dice textualmente lo siguiente:
 
1. Si una Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España, el Gobierno, previo requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma y, en el caso de no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones o para la protección del mencionado interés general.


2. Para la ejecución de las medidas previstas en el apartado anterior, el Gobierno podrá dar instrucciones a todas las autoridades de las Comunidades Autónomas.


Hemos tenido gobiernos que fueron muy blandos con el problema nacionalista de Cataluña y País Vasco, y que cedieron a casi todas las pretensiones que se plantearon en los debates, se aceptó todo tipo de chantaje hasta alcanzar un límite como el que estamos ahora viviendo, fruto de una educación, la de la Comunidad de Cataluña, que recoge sus frutos, tras haber instruido durante años a los niños y jóvenes, fomentando el odio hacia todo lo que pareciese español, olvidándose de que la mayoría de catalanes que viven en Cataluña, descienden de andaluces, extremeños y manchegos, que en su día emigraron a esta tierra en busca de trabajo, en una España de postguerra desolada, Franco decidió que la mejor solución era instalar la industria textil y de la automoción en Cataluña, como por ejemplo la fábrica Seat de automóviles, que dio trabajo a mucha gente durante décadas.
El nacionalismo se frota las manos con la crisis de la que aún no ha salido el España, se aprovecha la coyuntura económica para culpar al Estado, y fomentar aún más el deseo de un pueblo adoctrinado en unas ideas descabelladas para acusar al propio Estado de robarles y no entregarles nada a cambio. Se coacciona a todo aquel que piense diferente, se censura todo lo que no esté a favor de las ideas nacionalistas, por poner un ejemplo, hay familias catalanas de origen andaluz que, coaccionados por la presión nacionalista que ejerce la Generalitat, prohiben a sus hijas ir a clases de flamenco con el traje de faralaes.
 
¿Qué buscan los nacionalistas como el Señor Mas? El poder, aunque tengan que reducir su Estado a lo que es la actual Comunidad Autónoma de Cataluña, aunque tengan que dividir a la sociedad catalana entre nacionalistas y no nacionalistas y gobernar sólo para los primeros, marginando socialmente a los segundos. Se busca irse de un Estado monárquico de cientos de años para crear uno nuevo al estilo del antiguo III Reich alemán, un mini estado europeo intolerante políticamente donde todos estén adoctrinados, para poder resarcirse en que sus ideas nacionalistas son las correctas, un nuevo Mónaco pero estigmatizado por el tufo político de unas ideas caducas, habiendo engañado al pueblo y habiéndose engañado ellos mismos pensando que, sin el resto de España, estarían económicamente mejor y su economía crecería más que la de cualquier país de la Unión Europea.

¿Qué debe de hacer nuestro Gobierno, ese que ha elegido la mayoría del pueblo español? Hacer lo que nadie se ha atrevido a hacer hasta ahora, aplicar el Artículo 155 de la Constitución si el señor Arturo Mas decide convocar, ya sea referéndum o consulta soberanista al pueblo catalán sobre la independencia, asimismo se debe aplicar dicho Artículo si Arturo Mas prosigue forzando los límites legales de la Constitución en su labor como Presidente de una Comunidad Autónoma.
La Soberanía Nacional reside en el pueblo español, quienes ratificaron democráticamente en 1978 (los catalanes en mayoría) la Constitución y a Don Juan Carlos I como Jefe del Estado. Todo lo demás es acoso al Estado, a un Gobierno que titubea, y tiene un problema de manejar situaciones como éstas, donde no bastan las palabras, el pueblo pide acciones, hay que tomar la iniciativa de decirles a estos mercenarios que durante años han sacado hasta el último Euro al Gobierno central, basta, o ceden en sus propósitos, o se les suprime la Autonomía y la Generalitat si no cumplen dicho Artículo. Están obviando la Constitución, el Estado de las Autonomías y al resto de españoles, practicando una desobediencia política y social como auténticos desertores y traidores de la democracia y del Estado por sus ideas desproporcionadas.
¿A qué está esperando el Gobierno? Artículo 155 ya, por favor.

El 21-O



Los resultados de las encuestas no dejan lugar la duda, los resultados son los que todos esperábamos, el candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, revalidará su mandato en la Xunta gallega y, en País Vasco, el candidato del PNV, Íñigo Urkullu, le arrebatará el asiento de lehendakari al socialista Patxi López. Dejando de lado las elecciones gallegas, conviene prestarle atención al avance nacionalista. Urkullu le ha prometido al electorado, en tiempo de crisis, lo mismo que Mas a Cataluña, un nuevo estado europeo, en este caso llamado Euskadi. Se hace uso de la demagogia y se aprovecha el pesimismo con respecto al conjunto del Estado y el funcionamiento de las instituciones para ganar unos sufragios autonómicos. PNV y Bildu, derecha nacionalista e izquierda abertzale respectivamente, sumarían más de 50 diputados de los 75 que tiene el Parlamento Vasco. El avance nacionalista es preocupante, y la suma de fuerzas no nacionalistas da un resultado patético y paupérrimo. El índice de participación ha sido muy bajo, lo que beneficia a los partidos nacionalistas, y el poder de la coacción flota en el ambiente, como coacción hay en Cataluña también. Hay un refrán que dice 'en tiempo de crisis no conviene hacer mudanza'. Parece que tanto Euskadi como Cataluña se han propuesto hacer mudanzas en sus respectivas casas para irse del Estado español y permanecer en la Unión Europea. Más (no el político) preocupante será de ahora en adelante pensar qué se va a hacer, políticamente hablando, con estos dos problemas tumorales de la sociedad española, el de dos territorios que llevan pidiendo algo impensable, pero no imposible, desde hace casi cien años.

sábado, 20 de octubre de 2012

La Operación Emperador


Hace bastantes años que las mafias chinas campan a sus anchas por España. Lo que nunca pudimos averiguar fue cuánto dinero sacan del país cada año, dinero sin tasar, es decir, dinero negro que evade impuestos de la Hacienda española.

Los bazares chinos son tiendas en grandes superficies en las que uno entra y siempre encuentra lo que necesita, desde un lapicero hasta una plancha de vapor, lo tienen todo a un precio supuestamente económico. Hubo una época en nuestro país en la que había los famosos Todo a cien, pero éstos fueron sustituidos por los comercios de los chinos, quienes componen la mano de obra más barata y competitiva a nivel mundial.

El nuevo milenio  trajo consigo una nueva forma de venta, a bajo coste, de dudosa calidad, que, a fecha de hoy, no tiene competidor en España. No hay ciudad o pueblo en la península que no albergue este tipo de tiendas, las cuales abren los siete días de la semana y, algunas de ellas, las 24 horas del día. No contentos con llenar la caja de ingresos, algunos de estos comercios blanquean dinero, el cual llevan en barco o en tren a su país,para descrédito nuestro, que pecamos de buenos y les dejamos instalar este tipo de cadenas de venta, las cuales son para su único beneficio económico.

Ahora que la Policía Nacional ha desarticulado la Operación Emperador, podemos comprender mejor el alcance de tan inoportuna labor. La foto tomada por la Policía del dinero, en billetes de 50 euros, debería de hacer reaccionar al Gobierno de turno para fomentar la industria nacional, haciendo que este tipo de negocios se aleje del país, algunos de los cuales dan trabajo a nuestros jóvenes por un muy bajo sueldo y sufriendo de explotación laboral.

España se ha convertido en el país alcantarilla de Europa, siempre ha sido un país de trileros, pero ahora roza los límites de lo increíble. Muy necesitados de dinero deben de estar un Concejal del PSOE de Fuenlabrada o un actor porno internacional como Nacho Vidal para tomar parte y colaborar en este tipo de atraco al Estado.

Parece que el que tiene mucho quiere siempre más, que no se conforma con lo que tiene y vemos como en este caso la avaricia rompió el saco. Ya es tarde para recuperar dineros enviados en años anteriores, una media de entre cuatro y cinco millones de euros al mes, casi nada, sobre todo para un país en bancarrota como España. Tan culpable es el Gobierno y la Administración del Estado como los chinos, por permisivos y no haber inspeccionado este tipo de negocios desde un principio.

Hemos dejado que España se convierta en un país pionero en delinquir, invadido por bazares chinos, restaurantes chinos, locutorios chinos, pisos de chinos donde se alquilan habitaciones. Ahora toca descargar la ira sobre Nacho Vidal, haciéndole un juicio público, cuando aún no ha sido llamado a declarar, dado que es actor porno y la envidia es el deporte nacional, se le condena unánimemente por el tipo de trabajo que tiene, es decir, no se tolera que un hombre haya llegado alto por dedicarse a tener sexo delante de las cámaras con cuantas mujeres le plazca.

Vemos como se suceden uno tras otro los escándalos de evasión de impuestos en España, un país donde leer los medios de prensa es contemplar una colección de sucesos de delincuencia. No hace falta ser duque para robar, pero si se ha convertido en la práctica común en un país sin recursos económicos, muchos se están apuntando a la moda de participar en algo, lo que sea, que les pueda dar algún tipo de beneficio aún sabiendo que se están saltando la ley.

De ahora en adelante, cada vez que pase por una tienda china, me acordaré del pobre Nacho Vidal, ¡a quién se le ocurre!

¿Dónde tenías la cabeza Nacho?

miércoles, 17 de octubre de 2012

Voilá, España vs Francia

Un partido de fútbol tedioso y complicado el que jugó la pasada noche nuestra Selección contra los galos, España parecía Francia y Francia jugó a ser España.

De la euforia inicial del gol de Ramos terminamos con la aceptación del empate, ni España fue tan buena ni Francia fue tan mala.

Tenemos una selección de fútbol que, a día de hoy, es nuestro mejor y más grande embajador, se pasea invicta por Europa y por el mundo como si de Carlos I a caballo (y V de Alemania) se tratase, sin miedo a nada, lo que se le pone por delante lo arrasa, La Roja.

Muchos, entre los cuales me incluyo, preferiríamos tener unos políticos que fuesen como nuestros deportistas, nobles, leales, sacrificando el bien personal en función del bien general, auténticos camaleones de equipo, que se dejasen la sangre en lo que hacen, pero eso a día de hoy en España parece ser una utopía.
Ni la Monarquía, que durante muchos años fue la institución mejor valorada por los españoles, parece ya tener la confianza del pueblo, la gente se ha ido cada vez más distanciando de una Familia Real que, a medida que transcurre el paso del tiempo, comete más y más torpezas, algunas de ellas delante de los mismos medios de comunicación.
A Francia podemos ganarla en muchos partidos de tenis, de baloncesto, o de fútbol, pero a nivel de país competitivo en la historia del deporte, no hace falta más que echar la vista atrás y mirar los resultados de Juegos Olímpicos pasados, Francia tiene el 200% más de medallas conseguidas que España.
Esta pasada noche se han enfrentado dos países que son de los que más se odian y se aman en el mundo, como buenos vecinos, dijo una vez el embajador de Francia en España, Bruno Delaye, que no hay dos países que se parezcan más en todo en Europa como Francia y España, de hecho si echamos un vistazo a las estadísticas de parejas en las que cada cónyuge es de una nacionalidad, está demostrado científicamente que las parejas formadas por un español y una francesa, o una francés y una española, o francés español, francesa española, son las más duraderas y estables, por algo será.
La rivalidad entre Francia y España se remonta al siglo XV por cuestiones dinásticas y de familias reales con sus casamientos y se acentúa en el siglo XVI con el colonialismo español, España le dio muchas palizas a Francia, sus ejércitos eran los más poderosos y temibles del mundo, pero a mediados del siglo XVIII, con el declive del Imperio Español y, el auge de la Ilustración, Francia tomó ese papel dejado por España y su cultura impregnó todos los rincones del mundo.
A día de hoy, Francia tiene un PIB (producto de interior bruto) que es el doble que el de España, es la quinta economía mundial y potencia nuclear, el sueldo medio de un francés parte de los 1600 euros mensuales, en España para ganar apenas 1000 hay que soñarlo. Francia es un país merecedor de lo que tiene, nadie le baila el agua y son duros de pelar, románticos empedernidos y elegantes como ellos solos.
A medida que han ido pasando los últimos años del siglo XX, España se ha ido afrancesando y Francia se ha ido españolizando, España ha tomado lo peor de la sociedad francesa y lo ha aplicado, cada día que pasa es más superficial esta España nuestra, más insolidaria, materialista, frívola y pecaminosa, mientras que Francia ha tomado de España el conservadurismo que antaño tuvimos, así, si antes los españoles cruzaban la frontera pirenaica para ver películas prohibidas en nuestro país, tales como El último tango en París o Emmanuelle, ahora son los franceses quienes prohíben el topless en la playa artificial de París por considerarlo vulgar y afear la estética de la ciudad, es decir, que mientras en España hemos intentado pasarnos al porno duro, ellos siguen practicando el erotismo, insinuar pero mostrar, que es lo bonito.
La pasada noche España quedó en tablas con Francia, quizá eso demuestra que, a pesar de la diferencia económica, somos muy parecidos, se hizo justicia en un partido aburrido y raro. La Roja no le sacó los colores a Francia y Francia supo estar a la altura de las circunstancias.
Los franceses intentaron afrancesarnos en el siglo XIX, cuando las tropas napoleónicas invadieron la península, pero el pueblo español, ignorante en su mayoría, se negó, y expulsó al ejército francés sin arma alguna, con lo poco que se tenía a mano se organizó un 2 de mayo, el propio pueblo español se negaba a refinarse y prefería seguir siendo el “merdellón” que escuchaba como tocaban la guitarra española y tocaban la castañuela mientras bebían vino en la taberna.
Se perdió una gran oportunidad histórica, dichosos fueron aquellos afrancesados ilustrados que tuvieron esa oportunidad de adquirir la cultura, el refinamiento y la sabiduría necesarias, si eso se hubiese instalado y perdurado en la península, nos habríamos ahorrado muchas guerras y dictaduras posteriores, fruto de ese lado oscuro y auto-aniquilador que tenía el español medio de antaño.
España se quitó el complejo que arrastró durante dos siglos ganando un Mundial y dos Eurocopas, precisamente con esta gran Selección, que nos devolvió la gloria y la confianza en que, juntos, podemos seguir adelante, y, quizás, ganar el próximo Mundial de 2014.
A falta de políticos brillantes, hay grandes deportistas en España, que le plantan cara a cualquier país, sea Francia, Bielorrusia, o Italia, nuestro éxito internacional se basa en el fútbol de La Roja, en contraste con las rebajas que nos va haciendo Standard & Poor de ponernos al borde del bono basura, como Grecia

martes, 16 de octubre de 2012

Una, grande y libre Cataluña



“Explicamos el Estado plurinacional, no la España una, grande y libre” dijo el pasado domingo  Artur Mas, aludiendo a la polémica surgida por la declaración del Ministro de Educación, José Ignacio  Wert de que había que “españolizar a los niños catalanes”. Continúa el nacionalismo haciendo demagogia barata de la inoportuna, pero no por ello errónea, expresión del Ministro de Educación y Ciencia, de la cual se ha hablado en todos los medios la semana pasada.
Mas nos quiere contar la historia de que los niños catalanes tienen un sistema educativo mejor que el del resto de España, dando a entender que la historia que se estudia en Valladolid o en La Rioja está viciada, alterada, para darle el mérito a los vencedores y quitárselo a los vencidos, mentira, ni lo uno ni lo otro, falso, la historia que se estudia en España, en todo el territorio, de norte a sur y de este a oeste es neutral, con sus pros y sus contras, objetivista dentro de lo posible y no se omite nada, ni de un siglo ni de otro. Es una Historia verídica e imparcial.
Por contra, la Historia que se estudia en Cataluña, y a la vista está porque hemos observado diversos ejemplos en medios de comunicación como el pasado viernes en el programa de Intereconomía El gato al agua, es una Historia segmentada, parcialista, alterada, se omiten muchos episodios históricos, y los niños catalanes acaban la primaria, la ESO y el bachillerato, no sabiendo temas cruciales en la larga Historia de España, se les adoctrina desde el idioma catalán y desde el estudio, haciéndoles ver que el Estado español es un estado opresor y lleno de maldad que ahoga a la pobre Cataluña, crecen con esa idea, formados en un odio hacia todo lo que huela o respire a  español, para luego acabar sentados de parlamentarios en la Generalitat tomando medidas  como prohibir las corridas de toros, fruto de ese pensamiento único.
El Ministro Wert ha dicho la palabra de la discordia esta pasada semana, “españolizar”, ¿acaso está mal visto el término “españolizar”? Sí, sin lugar a dudas, por el Franquismo, apoyado por la Iglesia, que trató de españolizar a base de torturas y palos a aquellos que no comulgaban con sus  ideas, y actualmente por los inmigrantes latinoamericanos en España, que llevan en la cabeza la historia de que España cuando era un Imperio les robó el oro en esa empresa histórica de  “españolizar”. Unos y otros han convertido el término “españolizar” en un sinónimo de “imponer”.
Tan correcto es decir “españolizar” como decir “americanizar” o “afrancesar”, por suerte o por desgracia vivimos en un país llamado España, donde se habla mayoritariamente español, con una democracia consolidada, con sus ventajas e inconvenientes, pero a nadie se le pasa por la cabeza pensar que “españolizar” signifique intentar adoctrinar a los niños catalanes en algo que no sea constitucional y democrático.
Anticonstitucional debería de ser lo que ha estado haciendo el Gobierno de Cataluña con el sistema educativo catalán, pervirtiendo a los niños que ninguna culpa tienen y convirtiéndolos en instrumentos a sus favor de cara al futuro, ahogando las opciones a muchas familias de escolarizar a sus hijos en castellano.
Un  presidente de una Comunidad Autónoma así, debería de ser declarado anticonstitucional y  cesado de inmediato, porque avergüenza al resto del Estado creando mercenarios, haciendo propaganda barata y apología de un territorio que, si acaso algo fue en el pasado, pasó por el simple hecho de ser un condado del Reino de Aragón, pero estos niños estudian unos libros en los que se les dice que son una Nación desde hace mil años, o sea, desde antes que España existiera como Nación, ¿acaso no es eso manipular la Historia? El Ministro está en su derecho y tiene toda la razón cuando dijo su emblemática frase, la cual se comentó entre el rey Juan Carlos y Mariano Rajoy el día del desfile de las Fuerzas Armadas, dando lugar a otra polémica por una supuesta riña del Rey a Rajoy.
Lo que el Ministro debería de haber dicho en lugar de “españolizar”, pero no porque la palabra “españolizar” sea algo ofensivo o políticamente incorrecto, sino porque en pleno siglo XXI no  hace falta españolizar a nadie, porque todos en mayor o menor medida lo somos, lo que tendría que haber dicho es “hay que alfabetizar en algunas asignaturas a los niños catalanes”, no porque no sepan leer ni escribir, que sí saben, sino porque son analfabetos en asignaturas como Historia de España, donde se estudia el origen de Cataluña como algo divino y celestial, proverbial y único, como una cruzada en la historia cuya misión es el independentismo, ¿acaso no nos recuerda a los libros de educación del Franquismo? Idéntica misión, diferente tipo de nacionalismo, pero misma actitud de manipulación histórica a su antojo, donde se les cuenta que vienen de un ser todopoderoso, de una raza que esta por encima del bien y del mal y donde nunca estuvieron los romanos ni los griegos en su territorio.
El Ministro ha comenzado una muy noble tarea de devolverle a la juventud y a los niños el derecho a recibir una educación completa, donde estudien la invasión árabe de España, a Isabel II, que muchos de ellos ni saben quien fue, la caída del Imperio Romano, la Paz de Amiens, el Tratado de Versalles, la independencia de Guinea Ecuatorial, el desastre Colonial, o la Batalla de Trafalgar, porque sólo están haciendo hincapié en los capítulos referentes a Cataluña a lo largo de la historia, es decir, cuando nunca ha sido un país o nación en la Historia, y el resto de Historia se la inventan de forma troceada, poniendo y quitando lo que más o menos les gusta.
Por  tanto,  mientras  en  España  se  estudia  una  Historia  completa,  basada  en  la  libertad,  ajustada  a  los parámetros de la realidad tal y como fue, en Cataluña se les hace creer que son Una (sin España),Grande (se les  hace  creer  a  los  jóvenes  que  estarían  mejor y  más   prósperos  sin  España) y Libre  (afán  de independentismo).
Cataluña en esa línea política y de ideología va camino de ser un IV Reich del siglo XXI, y el  Estado en su conjunto,  va siendo hora de que empiece a detenerlo, la educación puede ser un buen sistema de corregir los intentos de adoctrinamiento por parte de partidos nacionalistas que gobiernan dicho territorio, pero hace falta mano dura para ello, y valor, porque no es de recibo, que en un país como el nuestro, tan viejo, tan evolucionado en algunos aspectos, se permitan hechos  como estos, que no tienen precedente, se trata de corregir los desperfectos de gobiernos anteriores, que tuvieron manga ancha con Cataluña, porque no podemos fiarnos de alguien que nos pueda traicionar, ya nunca más, ni caminar hacia ningún tipo de Federalismo.

lunes, 15 de octubre de 2012

Una democracia de muy mal gusto

Vivimos en una democracia de la que parece que, cada día más, cuesta fiarse. Uno de los rasgos esenciales de la democracia es la atribución de derechos y deberes a todo individuo e instituciones.

En época de crisis y vacas flacas, como la que estamos sufriendo desde hace unos años, el límite de los derechos y deberes parece estar difuso, y se sobrepasa en ocasiones numeradas.
Así, el mes pasado asistimos a actos vandálicos por parte de los manifestantes de Madrid del 25 y 29 de septiembre y a actos violentos por parte de los miembros de la Policía.
La pasada semana, observamos con ira e indignación como un presidente autonómico dijo que va a convocar un referéndum, en plena campaña electoral, para preguntarle a los habitantes de dicha Comunidad si quieren la independencia o no.
Por último, asistimos a una supuesta riña del Rey a Rajoy, durante el desfile de las Fuerzas Armadas, con motivo de las declaraciones del Ministro José Ignacio Wert sobre que “había que españolizar a los niños catalanes”, a lo cual Artur Mas, líder de CiU y Presidente en funciones de la Generalitat, ha respondido que en el resto de España la Educación es la de la época de Franco, “una grande y libre”.
Partiendo de la base de que, una vez más, el Rey se ha excedido en su papel constitucional, y ha llamado la atención a Rajoy, por la frase del Ministro de “españolizar”, estamos de nuevo ante uno de esos típicos casos frecuentes en los últimos años en los que Su Majestad se olvida de su papel de moderador neutral y símbolo del Estado, lo cual significa que no tiene atribución alguna para interferir en las labores del Gobierno, ni tan siquiera para opinar.
Me viene a la cabeza la imagen del Rey hace unos años mandando callar al Presidente Hugo Chávez en una de las Cumbres Iberoamericanas, aquel famoso “por qué no te callas” dio la vuelta al mundo, si bien era gracioso y se imitó hasta la saciedad, conviene recordar que, a Chávez, lo eligieron en las urnas, al Rey de alguna manera no, se le refrendó en el 78 votando la Constitución, pero no se le votó en referéndum, para bien o para mal, es más democrático Chávez que Su Majestad.
La democracia española cojea de tiempo acá, parece como que algunos, no todos, han optado por extralimitarse de su papel y van más allá de sus funciones, vemos con pavor como un presidente autonómico desafía al resto del Estado amenazando con convocar un referéndum anticonstitucional, contemplamos a un Príncipe que expresa su opinión sobre Cataluña diciendo que “es un problema menor”, siguiendo los pasos de su padre de opinar sobre la política de Estado, y por último, observamos que el Rey, supuestamente ha reprendido a Rajoy por un tema que no le debería de incumbir.
No sólo contemplamos como cada líder político, gubernamental o hasta el propio Jefe del Estado opina lo que quiere fuera de sus atribuciones e, incluso en algunos casos, fuera de la legalidad vigente, sino que los españoles estamos desinformados o mal informados por esta llamada democracia.
Aún no está claro si el Rey reprendió o no a Mariano Rajoy, durante días se ha especulado sobre este tema, pero lo gracioso viene cuando tanto Zarzuela como Moncloa desmiente que Su Majestad llamase la atención a Mariano Rajoy durante la celebración del Día de la Hispanidad, el pasado viernes, aunque todos pudimos ver en la televisión como hablaban del tema, por tanto el tema de “españolizar a los niños catalanes” era preocupante para el Rey.
Es más, aún no sabemos con certeza si hubo tal llamada de atención, he visto las imágenes un centenar de veces y puedo afirmar que veo que conversan preocupados sobre el tema, pero sí parece que el Rey le pregunta a Rajoy por la declaración del Ministro Wert y Rajoy se encoge de hombros y dice no saber qué opinar, como avergonzado.
Por tanto, asistimos a un bochornoso espectáculo de un Rey constitucional llamando la atención a un Presidente del Gobierno elegido democráticamente, sobre unas declaraciones muy honestas del Ministro de Educación, sobre algo que todos estamos de acuerdo, en que el modelo de educación catalán es partidista, nacionalista, la Historia que estudian los niños es sesgada, inventada y manipulada y se les fomenta ya desde niños, con mentiras y errores históricos, el odio hacia el resto del Estado, con la argumentación de que el Estado español les roba.
Y para rematar tal esperpento, el señor Mas, dice que va a convocar un referéndum, sea ilegal o no, para consultarle a la gente de Cataluña si quieren ser independientes o no. Caso único en Europa.
Falla la Democracia, va camino de convertirse en una Fallocracia, el Rey, con la edad, interfiere cada vez más en la opinión de los líderes políticos y en sus asuntos, opina sobre la actualidad, no sólo él, sino su hijo y nuera, algunos líderes políticos que son presidentes autonómicos, amenazan al conjunto de la Nación con convocar referéndums ilegales y el Príncipe, con sorna, dice que lo de Cataluña es “un problema menor”.
El pueblo español duda de si el Rey riñó o no Rajoy, yo pienso que sí, pero ahora intentar hacer un lavado de imagen, secundado por Moncloa, que sigue los dictados de Zarzuela en este tipo de menesteres. Una vez más se ha metido la pata, Mas se debe de estar frotando las manos. Al Príncipe le da igual, sólo quiere reinar y que su padre abdique. No lo hará. Como diría la Reina de Gran Bretaña “it’s a duty for life” (es un trabajo para toda la vida).
Pésimo papel de los máximos responsables del país, una vez más, mostrando una democracia con desniveles, a la que le fallan los cimientos, el protocolo, la frontera entre los límites de competencias, de muy mal gusto, una democracia hortera y donde cada cual hace o dice lo que le da la real gana. Sólo nos queda pensar que los tribunales y la justicia pueden, de vez en cuando, poner un freno a tal osadas aventuras. Para ello está el Tribunal Constitucional, del cual dudo también.

domingo, 14 de octubre de 2012

¿Qué día de Octubre?


El pasado viernes 12 de octubre se celebró la Fiesta Nacional de España o día de la Hispanidad, que conmemoró las efemérides históricas del Descubrimiento de América por parte de Cristóbal Colón y los Reyes Católicos tras la firma de las Capitulaciones de Santa Fe. Como cada 12 de octubre, se celebró un desfile militar al que asistieron el Rey junto a la Familia Real y los representantes más importantes de todos los poderes del Estado, además de la mayoría de los presidentes de las autonomías españolas.


El Descubrimiento de América en 1492 fue trascendental y el 12 de octubre se ha considerado como un día memorable porque a partir de entonces se inició el contacto entre Europa y América, que culminó con el llamado “encuentro de dos mundos”, que transforma las visiones del mundo y las vidas tanto de europeos como de americanos, ya que gracias a sus descubrimientos se gesta la Colonización Europea de América.

Ahora bien, lo que los españoles celebramos como una Fiesta Nacional y un día de orgullo por este hecho histórico, en otros países no se celebra de la misma manera.

Así, en Argentina se celebra el “Día del respeto a la diversidad cultural” (feriado nacional), es decir, se conmemora la diversidad étnica y cultural de todos los pueblos, es ésta la última denominación desde 2010; entre el 2007 y el 2010 se lo llamó el “Día de la Diversidad Cultural Americana”; y con anterioridad se le llamó “Día de la Raza”. Originalmente conmemoró el descubrimiento de América por parte del Imperio español.

En Estados Unidos se le denomina “Día de Colón” al 12 de octubre, en Costa Rica se le denomina “Día del encuentro de culturas”, en Belice “Día panamericano y día de Colón”, en Venezuela es el “Día de la resistencia indígena” (anteriormente denominado “Día de la Raza” también), en Nicaragua es el “Día del locutor”, en Perú y Uruguay es el “Día de las Américas”, en Chile es el “Día del descubrimiento de dos mundos”, y así podríamos continuar con el resto de los países que un día estuvieron bajo el poder del Imperio Español y, que a medida que Latinoamérica (un término erróneamente acuñado a la América hispanohablante) ha ido creciendo en importancia, todo lo referente al 12 de octubre, el descubrimiento del continente y la celebración de la Fiesta ha estado acompañada siempre de polémica, polémica que se dio años atrás en 1992 cuando se trató de impedir por parte de Naciones Unidas del V Centenario del Descubrimiento, lo cual se consiguió.

Cabe señalar el odio que aún profesan muchos latinoamericanos hacia España, odio basado en una malformación de la Historia y, que se ha transmitido de padres a hijos para denostar a un país que no hizo algo que no hubiesen podido hacer otros en su misma situación, en una época de exploraciones. España aceptó la independencia de todos los países latinoamericanos en el siglo XIX, cuando eran naciones prósperas y ricas, lo mismo que ahora reclama Cataluña, España no es responsable de que ahora les vaya mal a algunos, sobre todo porque han transcurrido más de 200 años y los gobernantes que han tenido han sido terribles.

En España no sobran los motivos para celebrar tal Fiesta Nacional, al contrario, faltan motivos y hay muchos para darle la espalda a una fecha que, poco a poco, provoca indiferencia por parte del pueblo. Los políticos nacionalistas han sido todos unos expertos en estas tareas, así, para algunos es más importante celebrar el 9 de Octubre, día de Valencia, o el 8 de septiembre, día de Asturias, que celebrar la Fiesta Nacional del 12 de octubre. En muchos libros escolares y de bachillerato de Cataluña apenas se habla del 12 de octubre o de por qué motivo se celebra.

El pueblo español se ha ido acostumbrado a medida que han ido pasando los años de reinado de Juan Carlos I a ver a toda la Familia Real acudir a la Carrera de San Jerónimo a presidir el desfile militar, si bien es cierto, que, tras lo ocurrido con el Duque de Palma, Iñaki Urdangarín, la indiferencia del pueblo hacia la Monarquía ha ido aumentando notablemente, y, por ende, hacia este tipo de celebración rancia y absoleta.

España es un país a fecha de hoy, dividido, por culpa de malos políticos y gobernantes, las autonomías, algunas no todas, se han hecho demasiado fuertes como para pedir la opción de ir por libre, quieren olvidarse algunos de todo aquello que huela a España, los toros, el himno, la bandera, y si pueden, el 12 de octubre.

Una España de separatismo, el ejército está mayoritariamente formado por extranjeros nacionalizados españoles que quieren huir de la crisis y la necesidad, una España que no acaba de fomentar los lazos con Latinoamérica porque el peso del pasado es demasiado fuerte como para que unos y otros acepten que vienen del mismo padre y madre. Una España con una Monarquía cuestionable y que también se ha visto salpicada por la podredumbre de la corrupción por culpa del “yernísimo”, y una España que tiene una crisis de identidad increíble, por un lado un gran complejo de superioridad hacia sus hermanos latinoamericanos, por otro lado un gran complejo de inferioridad hacia sus vecinos europeos, un gran pasotismo hacia la política y un gran radicalismo hacia la clase política por parte de los indignados.

Deberíamos de poner la fecha del 12 de octubre en suspenso hasta que seamos capaces de salir de la crisis, la marca España está devaluada, los inversores no confían en un país cuya solvencia ha bajado al nivel del bono basura, durante la celebración del Día de la Hispanidad, muchos estaban en la playa, algunos incluso pensando que lo mejor que se podría hacer con esta fecha histórica es dejarla como un homenaje a lo que nos une a todos, el idioma, convertirla en el día del Español (como idioma, no como individuo procedente de España), un homenaje a las letras y los escritores, a todos aquellos que escribieron en la lengua de Cervantes, Neruda, Mistral, Borges o Galdós, un nuevo 12 de octubre denominado “Día del Español, idioma universal”, porque, como todos hemos leído alguna vez, el idioma actual que mayor número de estudiantes tiene en el mundo es el español, con más de 20 millones de estudiantes, crece a pasos agigantados, sobre todo en Estados Unidos, y al cabo de unos cuantos cientos de años ocupará el lugar del inglés.

De aquí a unos años, por uno u otro motivo, apenas casi nadie se acordará de la fecha del 12 de octubre y de por qué motivo se celebra y por qué es la Fiesta Nacional.

Dirán eso de, ¿qué día de octubre es eso que me estás preguntando?

lunes, 8 de octubre de 2012

Evasión o victoria

Anoche asistimos a un clásico del fútbol español, el encuentro entre dos grandes, Real Madrid y F.C. Barcelona, los cuales disputaron su tercer y mejor enfrentamiento de esta temporada en el Camp Nou, con un resultado de empate 2-2. Los de Mourinho le regalan dos puntos al Barcelona y se mantienen a ocho de su máximo rival en la gran clasificación.

Tanto Messi como Cristiano Ronaldo estuvieron a la altura de las circunstancias, siendo Ronaldo quien marcó el primer gol, ambos tuvieron claras ocasiones de ganar el partido, el cual estuvo muy igualado en sus noventa minutos.
Lo paradójico de este encuentro merengue – culé, fue la afición blaugrana, la cual desplegó cartulinas rojas y amarillas en la grada formando una gran senyera catalana de cara a la galería, visualmente lo de anoche no tiene precedente en la historia del fútbol español ni en la de España como nación.
El mundo asistió, en vivo o a través de los medios de comunicación, al despliegue de una gran senyera catalana por parte de las 98.000 personas que llenaban el aforo del estadio.
No contentos con mostrar la senyera, en los minutos previos al partido y en los minutos se entonaron cánticos por parte de la afición al grito de “Independencia, independencia”, los cuales se repitieron en el minuto 17 y 14 segundos (para conmemorar la fecha de 1714 cuando el rey Felipe V tomó Barcelona) y pancartas con el lema Catalonia european next state (Cataluña nuevo estado europeo).
Es más que preocupante haber visto un evento futbolístico de tal magnitud politizado hasta tal extremo. Una vez más, en España, se mezcla el deporte con la política, se mezclan las churras con las merinas, todo en beneficio del pueblo que está hambriento de pan y circo, y se consiente, no se hace nada para impedirlo, lo cual demuestra la debilidad de un Estado resquebrajado, que tolera incidentes como el de anoche, que si bien son muestras de libertad de expresión, son ejemplos de una gran auténtica falta de respeto por parte de las autoridades catalanas a la afición del F.C Barcelona, cuya peña de socios está formada mayoritariamente por personas no catalanas, sin las cuales, no podría subsistir como club de fútbol.
Dice Arturo Mas sobre el espectáculo de anoche: “hay que destacar este ambiente espectacular, y además respirando este país, muy catalán, muy catalanista, pero a la vez este ambiente muy positivo y educado”. Se frota la manos el President en funciones porque se ha conseguido lo que los circuitos catalanistas buscaban previo al partido, llenar un estadio de casi 100.000 personas con sólo y exclusivamente personas de ideología radical o nacionalista que estuviesen dispuestas a portar esteladas (banderas independentistas) y senyeras (banderas catalanas) y cánticos a favor del despropósito de la independencia.
Porque si analizamos la cuestión del graderío, en un estadio que tiene un aforo para casi 100.000 personas, que es el estadio más grande de Europa, ¿cómo es posible que se llene sólo con personales nacionalistas? ¿Selección natural? ¿Dónde estaban los socios del F.C. Barcelona catalanes no nacionalistas que suelen acudir a este tipo de partidos? Me imagino que estarían en casa para evitar el bochorno o no se les habría permitido el acceso con la excusa del “lleno total” del estadio.
Con lo cual por un lado tenemos a unos líderes políticos que gobiernan el Parlamento de Cataluña pertenecientes a una ideología concreta, los miembros del partido CIU (Convergencia i Unió) que gobiernan sólo para los nacionalistas independentistas y se olvidan de su electorado no independentista, y, por otro lado, tenemos un estadio que pertenece a un club de fútbol que es de todos los socios del F.C. Barcelona, es decir, catalanes (independentistas o no) y resto de españoles que se llena a tope de asistentes pero sólo de una ideología en particular, la nacionalista radical independentista.
Me recuerda lo sucedido la pasada noche a la película de John Huston de 1981 Evasión o Victoria, protagonizada por Pelé, Sylvester Stallone y Max Von Sydow,
La película está inspirada en un hecho real llamado El partido de la muerte. El 9 de agosto de 1942, el FC Start, un equipo de ex-jugadores del FC Dinamo de Kiev (en su mayor parte) se enfrentó al más potente equipo alemán, en la época en que Ucrania estaba ocupada por el III Reich. Los jugadores del FC Start, a pesar de ser advertidos de que, en caso de vencer, serían ejecutados, ganaron y humillaron a los alemanes para el delirio colectivo. Pocos días después las amenazas se cumplieron.
A pesar de estar inspirada en este hecho real, la historia de la película varía un poco con respecto a la misma. La película está ambientada hacia 1943 en el campo de concentración de Gensdorff. Un oficial alemán visita el campo y ve a unos prisioneros jugar al fútbol, y, al recordar que había sido jugador antes de la guerra, se le ocurre organizar un encuentro entre una selección de futbolistas alemanes y los prisioneros.
La pasada noche hubiese sido anecdótico que, en un estadio de seguidores del Barça, en este caso sólo miembros de la Asamblea Catalana e independentistas, donde el equipo juega en casa ante su afición, hubiese ganado el Real Madrid, el cual tuvo claras ocasiones de hacerlo, ya a los pocos minutos de comenzar el partido, con el gol de Ronaldo, había una cierta esperanza, hubiesen tenido que salir por peteneras del estadio en caso de ganar, ante el delirio nacionalista y la indignación, porque esa victoria, aunque sólo futbolística, para algunos habría representado el triunfo del Estado español ante un territorio que se quiere independizar, hubiese sido tomado mal por todos estos visitantes al estadio portando pancartas y banderas, hubiese sido una gran decepción, la derrota y humillación de una Comunidad Autónoma, que utiliza a un club de fútbol, cuyos socios mayoritariamente están fuera de Cataluña, para imponer su ideología y mostrarlo al resto del mundo, humillando a la vieja España.
Pero lo paradójico es que el resultado fue un inesperado empate, si lo tomamos desde el punto de vista simbólico, estas tablas significan que ni independencia ni centralismo feroz, sino que ambos, el Estado español y el conjunto de catalanes, están condenados a entenderse y a cooperar, sin secesiones ni federalismos, sin crispación por ambos lados, porque tanto monta monta tanto, España incluye Cataluña y Cataluña es parte integral de España y la Unión Europea, sólo contemplaría una incorporación de Cataluña en su seno si España se lo permite, y España por ahí no pasa, porque España somos todos, la Soberanía Nacional es del pueblo español, de todos.
Anoche hubiese sido necesario por parte del poder político este tipo de espectáculos, pero a Cataluña se le ha dado demasiado poder por parte del Gobierno de la Nación, hasta el extremo de que todo este entramado político de llenar un estadio y utilizar un partido de fútbol para mostrar su desacuerdo con formar parte del Estado, ha sido permitido con el visto bueno de una Generalitat politizada y corrompida hasta límites inimaginables.
Me pregunto qué pensaban los jugadores en ese momento mientras corrían detrás de la pelota, porque unos más y otros menos, nadie es indiferente a este tipo de bochornosos espectáculos.
Si España fuese un país serio, anoche se hubiese tomado medidas para evitar este tipo de “demostraciones pacíficas” y exaltaciones que me recordaban a las del Bernabéu con Franco en otros tiempos, mismo perro, diferente collar.