Sin embargo, es totalmente incorrecto el uso del adjetivo “latino” para referirse al hispanoamericano, ya que la denominación “latino” corresponde inherentemente a la zona de Italia designada por tal nombre en la época de la Antigua Roma (Latium).

Posteriormente, y por interés francés, este significado fue extendido a cualquier parlante de una lengua derivada del latín, cuando normalmente esta referencia es a lenguas romances (derivadas del latín romano), tales como el italiano, francés, español, portugués, gallego, asturiano, catalán, etc. Éstas serían lenguas romances (o latinas, con la nueva designación francesa).

El término «América Latina» suele referirse cultural y exclusivamente a los países de habla española y 
portuguesa del continente americano; incluyendo a Puerto Rico, aunque sea un Estado Libre Asociado de los 
Estados Unidos de América. Haití es incluido a veces porque comparte la isla de La Española con la República Dominicana Según la definición de la Real Academia Española, «América Latina» es el conjunto de países del continente americano en que se hablan lenguas romances, específicamente español, portugués y francés. De acuerdo con esta definición, «América Latina» incluye a Hispanoamérica (países de habla española), Brasil (de habla portuguesa) y Haití (donde el francés es lengua oficial aunque el criollo haitiano es el idioma comúnmente utilizado).
El abuso del término América Latina ha redundado en la aplicación de la palabra latino en asociación con él, recogiéndose así en diversos diccionarios, suele considerarse correcto utilizarla para referirse al pueblo latino, originario del Lacio (península Itálica). Sin embargo, la designación no se aplica en ningún caso a los países de lengua no latina de América del Sur (como Surinam y Guyana), el Caribe (decenas de islas de habla inglesa y neerlandesa), o América Central (como Belice, que tiene al inglés como idioma oficial, aunque el español es la lengua mayormente hablada).
Los países que integran Latinoamérica comparten inmensas similitudes culturales por haber sido territorios coloniales de España, Portugal y Francia. Sin embargo, entre ellos también se observan grandes variaciones climáticas, económicas, lingüísticas, étnicas, políticas y sociales, por lo que no se puede hablar de un bloque uniforme.
El término Iberoamérica no debe confundirse con los conceptos de Hispanoamérica y Latinoamérica. «Hispanoamérica» es más restrictivo, ya que sólo se refiere a los países de lengua española. «Latinoamérica» es más amplio, ya que no sólo engloba a los países de lengua española y portuguesa como Iberoamérica, sino que además contempla a los territorios colonizados por Francia (excepto Canadá y Luisiana) y los hablantes de portugués.
A pesar que una parte importante del territorio actual de Estados Unidos alguna vez formó parte del Imperio español o posteriormente del México independiente (el gran territorio original de la Luisiana, la península de la Florida, estados del suroeste y oeste –desde Texas hasta el estado de Washington) no se considera a este país como parte de Iberoamérica. Esto es debido a que los orígenes histórico-culturales de EE.UU. no son hispánicos.
Sin embargo, muchos concursantes del Festival OTI de la Canción, han representado a EE.UU. en diversas oportunidades. Incluso, en algunas ocasiones, concurrieron a dicho festival representantes de Canadá, aunque los concursantes sólo cantaban en español.
Finalmente el término «América» abarca a todas las poblaciones, culturas y países del continente americano. A razón del debate por el uso de la palabra americano se ha dado la iniciativa de crear la expresión «panamericanismo» y ha sido atribuida a los americanos de origen anglosajón, y principalmente promovido por los EE.UU, a la vez que ha sido combatida por grupos y sectores que denuncian una práctica de dominación sobre el resto de los países americanos.